El viernes 11 de Mayo, se llevó a cabo la segunda reunión de la mesa consultiva del río Gualí en el municipio de Mariquita. La reunión hace parte del trabajo de continuidad al proyecto “Piloto de implementación de la política para la gestión integral del recurso hídrico (cuenca del río Gualí)”. A la reunión asistieron 16 representantes de la comunidad quienes tuvieron la oportunidad de participar del taller instalado en tres mesas de trabajo dispuestas por funcionarios de ASOCARS-CORTOLIMA.
Durante la jornada, los profesionales de la corporación José Hember Ramírez, Lina Maria Echeverry y Carina Villegas Calle, socializaron a los habitantes los conceptos de cuenca, POMCA y consejo de cuenca. En la jornada que duró desde las 8 de la mañana hasta las 6 de la tarde participaron representantes de las veredas Gualí, La esperanza, Honda, bajo Gualí y de los municipios de Herveo, Honda, los representantes de los acueductos de los acueductos cabaña y vereda el pomo – cabañas, asimismo asistió a la jornada Ricardo Cárdenas del comité de cafeteros entre otros.
Por otra parte los días sábado y domingo se realizó un recorrido por el páramo de letras, ubicado en inmediaciones de los departamentos del Tolima y Caldas con el grupo de expertos en hidrología e hidráulica de ASOCARS- CORTOLIMA, los profesores de la Universidad Nacional, Erasmo Rodríguez y Alejandro Avendaño, y Michael Mclain profesor de ecohidrología en el instituto UNIESCO IHE. El recorrido se realizó como ejercicio de reconocimiento del área en el que se pudo visitar el río Gualí cerca del sitio en el que nace.
Parte de las observaciones hechas por los profesionales estuvieron relacionadas con la deforestación paulatina del páramo, la erosión causada por esta, el impacto negativo que causan los cultivos de lulo y café en términos de deforestación y contaminación, y las grandes extensiones de potreros creados para la tenencia de ganado vacuno. En este sentido, la principal preocupación de los profesionales es la detener el deterioro en la cuenca.
Parte de las estrategias para lograrlo, consistirán en emprender campañas educativas que vinculen al sector privado, ASOCARS-CORTOLIMA y las comunidades habitantes del páramo directamente responsables de su conservación, y la implementación de proyectos productivos que permitan cambiar los hábitos de siembra y de uso de los recursos naturales y especies que pueblan la región mediante la articulación y el serio compromiso de estos tres sectores.
