Como una estrategia hacía el manejo sostenible de la Cuenca del río Combeima, se llevó a cabo el Primer Concurso de Proyectos Ambientales Escolares PRAE de las Instituciones Educativas ubicadas en la zona de influencia del "Proyecto Combeima" del cual hace parte CORTOLIMA y con el que se logró vincular a los niños, niñas, jóvenes y comunidad educativa de la zona.
En total fueron 10 los Proyectos Ambientales Escolares que concursaron y presentaron sus mejores muestras de trabajo a través de stands ubicados en las instalaciones del Colegio Mariano Melendro de Chapetón; con el objetivo de ser calificados, pero sobretodo con el orgullo de ser reconocidos y valorados, ya que cada proyecto refleja el esfuerzo y compromiso de los mismos estudiantes que de la mano de sus docentes, dieron vida a estos PRAE para el beneficio de su entorno y mejoramiento de la calidad de vida de sus comunidades.

De esta manera, cada Institución Educativa presentó ante el jurado calificador, estudiantes y docentes, sus propuestas para rescatar el verde puro de ese cañón que día a día ve a estos estudiantes recorrer largos caminos para llegar hasta sus escuelas, y al que ahora tratan de recuperar con iniciativas entre las que se destacan la creación de puntos ecológicos, huertas orgánicas de hortalizas y plantas medicinales, instrumentos musicales construidos a partir de materiales reciclados y semillas, planes de manejo para la conservación de los suelos, la agricultura y el cambio climático; protección y avistamiento de aves, entre otros.

Proyectos Escolares Ganadores
El lenguaje universal de la música se robó el protagonismo de la jornada, y fue la Institución Educativa Ramos y Astilleros con su Proyecto “La Semilla Me Suena” la merecedora del primer puesto. Una idea muy innovadora y artística, donde los estudiantes demostraron que aprovechando elementos reciclables como envases plásticos de botellas y semillas de achira, se pueden diseñar valiosos instrumentos musicales que aportan a su formación cultural.

“Con esta actividad lo que queremos enseñarles a los niños es a que ayuden a cultivar y aprovechar su tierra y fuera de eso a valorarla y protegerla. La tierra nos da muchos recursos y muchas veces los desechamos y botamos, pero esta vez los empleamos para hacer implementos que son necesarios para nosotros, en este caso nuestro proyecto fue hacer instrumentos musicales.” Resaltó Nidia Constanza Ascencio Camacho, docente líder del proyecto PRAE en la sede de Ramos Astilleros.

El segundo lugar lo obtuvo la Institución Educativa Técnica Ambiental Combeima Sede el Retiro con el Proyecto “Amigos de las Aves” con el que buscan proteger y reforestar el hábitat de la avifauna de esta zona digna para el ecoturismo de avistamiento de aves, así como respetar la llegada de las imponentes águilas cuaresmeras que cada año visitan esta zona del Departamento, ya que como lo dice su slogan “pequeñas acciones cotidianas, hacen grandes acciones colectivas en favor del medio ambiente.”

El tercer y cuarto lugar de calificación fue para las Instituciones Educativas Cay Bajo y Olaya Herrera con los Proyectos “Embelleciendo mi Escuela” y el “Guaguarquito” respectivamente. El primero es una propuesta de reciclaje de botellas de gaseosa para la construcción de materas y jardín, que no solo embellece a la escuela sino representa una estrategia de manejo de residuos sólidos. El proyecto del Olaya Herrera busca proteger el nacimiento de la quebrada el Guaguarquito con actividades de reforestación y aislamiento protector.

Por último, el quinto lugar de mención lo recibió la Institución Educativa el Gallo con su Proyecto “El Gallo Reciclador” una propuesta que contempla la creación de puntos ecológicos elaborados a partir de botellas plásticas que permiten realizar la separación de las basuras en la fuente, así como contribuir al manejo adecuado de los residuos sólidos.

Al final de la jornada, se resaltó el trabajo de todas las Instituciones Educativas participantes, donde el verdadero y único ganador fue el Cañón del Combeima y su riqueza ambiental, que seguirá siendo protegida a través de las ideas puestas en marcha por estos jóvenes estudiantes a través de sus Proyectos Ambientales Escolares, los mismos que esperan seguir creciendo para volver a participar el próximo año en la segunda versión de este concurso que nos enseña a todos los tolimenses que con pequeñas acciones podemos transformar positivamente nuestro entorno en favor de los recursos naturales.


