Actualmente el departamento del Tolima cuenta con 14 ríos que nacen y mueren en los límites del territorio, uno de ellos es el Río Cuamo, que limita con los municipios de Armero Guayabal y Falan desembocando en el río Sabandija, este afluente se caracteriza por ser altamente torrencial lo que genera inconvenientes de estabilidad en lado y lado del cauce.
Como consecuencia del fenómeno de la “niña” esta microcuenca constantemente sufre variaciones en su recorrido, debido al aumento del caudal, lo que ha obligado a ampliar su cauce, buscando medios para reducir la energía que se incrementa en todo su trayecto, como consecuencia de lo anterior se originan los procesos de socavación lateral especialmente sobre las bases del puente, que comunica los municipios de Armero Guayabal y Falan.
Adicionalmente, el río Cuamo presenta un comportamiento torrencial, debido a que en tiempo de verano su caudal en muy poco, pero en época de invierno aumenta de una manera considerable, trayendo como consecuencia el transporte de material de la parte alta del afluente que se depositada en su parte plana, generando el desbordamiento y afectación en los predios adyacentes.

Atendiendo al comportamiento que este afluente presenta, La Corporación Autónoma Regional del Tolima, en Diciembre de 2010 firma el convenio 033 con la alcaldía de Armero Guayabal, el cual busca “Aunar esfuerzos económicos, técnicos, logísticos y humanos, para realizar el dragado y corrección del cauce del río Cuamo, en el sector donde se encuentra ubicado el puente que comunica al municipio de Armero Guayabal con el municipio de Falan del departamento del Tolima”
El objetivo de este convenio era recuperar un sector del cauce, donde el río amenazaba con destruir la infraestructura de desarrollo de la región como es el caso de un puente y la banca de la vía, con la ejecución del dragado y corrección del afluente, lo que se pretendía era recuperar la sección hidráulica en este sector, debido a que la ubicación del puente, presenta una topográfica casi plana, generando depósitos de sedimentos, provocando que se desborden sus aguas.
De esta manera, la entidad ambiental quiere dejar claro que las obras realizadas son de mitigación sobre la microcuenca de el río Cuamo, las cuales buscan evitar de manera temporal el desbordamiento de este. Es importante que en esta época invernal, se impida o evite la construcción de viviendas en la rivera de todos los ríos, especialmente en el río Cuamo, por su característica torrencial.

