En busca que la ciudad musical pueda respirar constantemente un mejor aire; Cortolima desarrolló distintas actividades de educación ambiental para generar una conciencia más amigable con los recursos naturales dando ejemplo y demostrando que con esfuerzo de cada Ibaguereño es posible un ambiente sano.
Una de las actividades más significativas, fue la siembra de 50 plántulas de las especies nativas Gualanday y Ocobo en el “Cerro Pan de Azúcar”. “Estos individuos arbóreos aparte de embellecer este “pulmón natural”; prestarán a medida que vayan creciendo, más de 18 servicios ambientales” así lo indicó el Director General de Cortolima, Jorge Enrique Cardoso; quien luego, junto a los estudiantes de las Institución Educativa Germán Pardo, sede La Paz; el Colegio Casa Evangélica y miembros del grupo de Agricultura Urbana comuna dos iniciaron la siembra.
Esta actividad tuvo la participación activa del Museo de Arte del Tolima (MAT), la Defensa Civil y líderes de la comunidad; quienes reconocieron la importancia de este activo ambiental y de la mano de la Corporación se comprometieron a continuar realizando actividades constantes para su preservación.

En el marco de este importante día que sirve para descontaminar Ibagué; los funcionarios de la autoridad ambiental se vistieron deportivamente y acataron el llamado de usar medios alternativos de transporte.

Finalmente también el grupo de ciclistas aficionados de la Corporación aprovecharon el espacio para participar en la Ciclovía.
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